El día de hoy me di cuenta que quiero descubrir mi habilidad para colgar zapatos en un cable. Para eso necesito primero encontrar el cable indicado, tiene que ser uno grueso y bien tenso, que pueda con la carga de mis zapatos y sobretodo que pueda cargar, digo, ostentar el titulo de ser el primero de los cables que lleve mis zapatos. También tiene que ser uno alto, porque quiero que le de importancia a mi trabajo, porque debe sobresalir de los demás. Todas estas aptitudes de mi cable ideal deberán presentarse en una calle que además de todo debe estar en una colonia importante. Importante para mi porque en realidad eso es lo que importa. Y la calle, tiene que ser una calle con mucha afluencia de personas, porque la gente es la que decidirá si tengo o no el talento suficiente para colgar zapatos en un cable y se, que entre mas personas pasen y lo vean, mas acertada sera la decisión.
También los zapatos deben tener su historia personal, que lleven dentro el olor de los años que pasaron junto a mis pies, que le puedan contar a la gente los lugares que visitamos, que le muestren al mundo lo grandes que fueron al aguantar mi peso tanto tiempo. La única condición que pongo en este caso es que deben tener cintas, porque hoy en día a los zapatos no les gustan las agujetas, quizás por eso se ha terminado la folclórica practica de colgar los zapatos en un cable, pero no se preocupen, yo he encontrado mi misión en esta vida, y me preparare para hacerla bien.
